Fue un día complicado para Internet, incluyendo a Tecnogeek, porque Cloudflare tuvo uno de esos raros episodios donde todo sale mal.
Al parecer Cloudflare sufrió algún misterioso aumento de tráfico de gran orden de magnitud lo que provocó que quien hace de “filtro” de bots y spiders tuviera un bajón importante de servicio.
Como muchos lo utilizamos, justamente para tener un buen filtro, cache y DNS asegurado, obviamente nos caímos todos. Esto incluye a grandes como ChatGPT o Twitter (X para Musk, yo lo sigo llamado Twitter).
Desde el sitio web de status de Cloudflare pudimos ir siguiendo el trabajo de la compañía mitigando el problema y luego de un fix todo empezó a funcionar normalmente.
Como siempre en estos casos el problema recide en algún punto ínfimo y débil de toda la cadena, una configuración que provocó que una porción pequeña de todo Cloudflare tuviera que manejar más tráfico de lo habitual, y luego un proceso de cascada que interrumpió todo el funcionamiento.
No es fácil ser el que “ataja” millones y millones de requests por segundo y requiere una infraestructura enorme y que los cambios que se le realicen sean imperceptibles.
Hoy por hoy un 20% de los servicios de Internet se escudan detrás de Cloudflare, algunos como Spotify, Zoom, Uber, inclusive proveedores de servicios similares como Amazon y Azure, desde ya que desde el punto de vista de los negocios es “inaceptable”, no tanto para aquellos que usamos la versión gratuita, sino que esto afectó a los usuarios pagos también, todos por igual.
Entre la caída de AWS el mes pasado y Cloudflare hoy queda en claro que en esta Internet actual este tipo de problemas afectan de forma masiva a todo el mundo y de lo terriblemente dependiente que somos hacia ellos, Internet ya no es un sistema distribuido, son pocos bloques que en cualquier momento pueden caer dejándonos a todos en una nebulosa.
