No es una notebook usual pero está claro quién es su rival. La Asus ProArt busca pelear el mercado profesional en el que Apple está, a los codazos, entrando fuerte con la MacBook Pro. Así que el precio, prohibitivo para cualquier mortal, es tan sólo para un nicho de mercado.
No es que nadie necesite un procesador de Workstation en su computadora de día a día, de hecho, nadie en su sano juicio usaría una notebook para estos workflows, pero la Asus ProArt Studiobook Pro 16 OLED (W7600) apunta a un tipo de trabajo que nos escapa a la mayoría.
Hablamos de producción de video y CGI a nivel alto, AutoCad, corrección de color, postprocesamiento y muchas cosas que pueden llegar a necesitarse como un primer paso en producciones mucho más grandes y complejas que luego procesan todo en workstations grandes.
El modelo más caro de esta gama es la W7600 que no sólo ofrece un Intel Xeon W-11955M sino un GPU de Nvidia, el RTX A5000, el resto de la familia tiene specs más modestas con, por ejemplo, Intel Core i7-11800H o Nvidia GeForce RTX 3060, que de modestas no tienen nada, claro.
La pantalla es OLED de 16″ a 3840×2400 (16:10, vuelven los ratios más cuadrados y eso me gusta) con soporte para HDR, tasa de refresco de 120Hz, 283ppi, 550 nits.
La memoria RAM es de 64GB DDR4-3200 con un par de slots PCIe, uno 4.0 x4 y otro 3.0 x4, Thunderbolt 4, un USB-C 3.2 Gen2, dos USB-A 3.2 Gen2, un HDMI 2.1, RJ45, audio de 3.5mm.
El procesador cuenta con ocho núcleos y 16 threads a 2.6GHz con turbo a 5GHz, con un TDP configurable de 45W a 95W temporal o 75W constante. El GPU cuenta con sus propios 16GB de GDDR6 con un boost hasta 1455Mhz y 110W, la RTX A5000 es del modelo Max-Q que tiene un perfil más fino.
Esto lleva a la Asus a un grosor de 19.6mm con 2.4Kg de peso, batería que dura unas 6 horas (como si alguien la fuese a usar desenchufada). La disponibilidad será desde el primer trimestre del año que viene.
Detalle interesante el ASUS Dial que trae: